Es una buena opción siempre que el baño sea amplio, ya que se necesita espacio para poder abrir la puerta.
Son una opción muy práctica en baños pequeños, porque no restan ni un cm.
Resulta muy cómodo y facilita el mantenimiento. Es importante que se deje un espacio lo suficientemente amplio para cubrir al que se baña y para poder acceder a la ducha.
Cuanta mayor sea la altura de la mampara, menores serán las salpicaduras.
Resulta muy práctico si buscas preservar la intimidad sin restar claridad.